Muzza, faina, fugazzetta, Napolitana….sin duda para 1989 había mucha pizza, pero faltaba algo, faltaba una buena pizza, esa que entra por los sentidos y te conquista para siempre. Con ese espíritu abrimos nuestro primer ROMARIO en Juncal esquina Junín. Salimos a la conquista de los sentidos con nuestras mejores armas: ingredientes de primerísima calidad y nuestra pasión por combinar los sabores como solo nosotros sabemos hacerlo. Así nos encontramos con la gente, compartiendo en nuestro pequeño local de apenas 50 metros cuadrados, una barra, cinco mesas, tres empleados y muchas, pero muchas ganas de mostrarles a todos que teníamos para ellos lo que estaban buscando en pizzas y empanadas. Las largas colas a la espera de sus pedidos, en tiempos en que la palabra delivery no existía aun ni en los diccionarios, nos dieron la razón. Habíamos creado un nuevo estilo.
Llegó el año 1991 y con él llegó ROMARIO a Cabello esquina Ugarteche. Es que la gente nos pedía más y decidimos hacerles caso. Por entonces nuestro nombre empezaba a sonar por encima de reconocidas pizzerías. Hasta nos otorgaron títulos docentes cuando algunos de nuestros clientes nos esbozaban algún “¡maestro!” al probar nuestros gustos en empanadas mientras esperaba su pedido. Y fuimos por más….mucho más! En 1993 decidimos dar el gran salto para caer en pleno corazón de recoleta, en Montevideo entre Quintana y Guido. Aquí nos encontramos con las exigencias no solo de aquellos que habitan esta tradicional zona, sino también de grandes degustadores de pizza de todas partes del mundo. Y nos preguntamos, ¿Tendremos que aprender idiomas? Si, y mientras nos avocamos a esa tarea descubrimos que el pulgar en alto y una sonrisa de oreja a oreja fue la mejor forma de comunicación que ellos encontraron para expresarnos su satisfacción. Hasta hubo quien se animo a soltar esa M larga entrecerrando sus ojos mientras se fundía en su boca alguna de nuestras especialidades. Inconfundible, ¿no?
A nuestro afán de crecer pensamos en agregarle vértigo, para que la gente se encontrara rápidamente con nuestros sabores. Para 1994, ROMARIO en Vicente Lopez esquina Uriburu era una realidad, y con este nuevo local nació nuestro sistema de Delivery, único por sus características ya que decidimos que nuestras entregas debían combinar ecología, estética y deporte. De esta combinación surgieron nuestros patinadores para hacer sus repartos. Fuimos los primeros en esto, asombrando gratamente a toda la ciudad con nuestra ingeniosa idea, hoy imitada en varios lugares del mundo. Y así seguimos andando, fundando nuevos locales como el del por entonces desconocido barrio Las Cañitas, allá por el año 1995 en la esquina de Ortega y Gasset y Migueletes. Si, fuimos pioneros en aquel lugar. Llegamos primeros con nuestros gustos a donde hoy todo el mundo reconoce como el lugar por excelencia para relajarse y pasar un buen momento, y no fue casual.
Ya por entonces ROMARIO había crecido por encima de nuestras propias expectativas. Esa inercia fenomenal nos llevó a crear en 1996 nuestra División Catering montada en dos camioncitos franceses marca Citroën, acondicionados como verdaderas pizzerías ambulantes. Paradójicamente, estos antiguos camiones que datan de la década del 30 aceleraron nuestro vertiginoso crecimiento, distinguiéndonos en eventos sociales, deportivos, lanzamientos de productos, inauguraciones de empresas, etc. Entre los mas destacados podemos mencionar el Campeonato Argentino de Polo, competencias de rally, top race y supercross, Test matches de Los Pumas, jornadas locales del torneo de la URBA para Regatas de Bella Vista, lanzamiento del vino River Plate, eventos Brama, Creamfields (la fiesta mainstream mas importante del año), y hasta en el Homenaje al Príncipe Carlos de Inglaterra.
Al tiempo de esta notable expansión nació el proyecto de generar una red Intranet que mantuviera vinculada a todos nuestros locales. Creamos ROMARIO en RED, facilitando el sistema de pedidos a un único número telefónico. Este crecimiento nos permitió brindar mas puestos de trabajo, ayudando a la economía del país. Así continuamos con nuestra buena costumbre de crear nuevos espacios “con buen gusto”.
En 1997 abrimos el ROMARIO de Arenales y Ayacucho. Este nuevo local, mucho más amplio y adecuado para satisfacer la creciente demanda de nuestros clientes fue creado para reemplazar a nuestro primer local. No faltó la nostalgia al ver que nuestro querido Juncal se cerraba, lugar donde nacieron nuestras ilusiones, donde dimos rienda suelta a la magia del buen sabor.
Para el 98 explotábamos, y el epicentro de esa explosión estaba en pleno Botánico. Por esto surge una sucursal concebida exclusivamente para “Delivery” cubriendo la demanda de aquella zona.
En el ´99 nace Güemes esquina Vidt atendiendo la zona del Alto Palermo, y en ese mismo año otro local en Juncal entre Bustamante y Austria. Mantuvimos intacta nuestra tradición y estilo por aquella reconocida y exigente zona de Barrio Norte, y el publico nos reconoció concurriendo masivamente a estos locales distinguidos por sus palmeras, sus paredes color pastel, sus sillas thonet, sus mesas y barras de madera oscura, todo esto envuelto en una cálida luz ambarina.
Al año siguiente fundamos un nuevo local, Beruti esquina Ecuador, en una antigua casona que supimos adaptar manteniendo sus particularidades arquitectónicas, a las necesidades y al diseño característico de nuestras sucursales. El resultado fue un espacio óptimo, distinguido por una formidable pared de mayólicas españolas. Sin lugar a dudas, es uno de nuestros locales más bonitos.
En el 2001 inauguramos nuestro Centro de Logística “La Fabrica”. Este lugar de 800m2 de superficie está equipado con la más alta tecnología. Aquí no sólo se elaboran nuestros productos, sino que además se realizan los controles de calidad para que los mismos lleguen en óptimas condiciones a destino.
Y seguimos avanzando, decidimos “exportar” nuestra pasión por la buena pizza a la glamorosa localidad de Martínez. Con el imponente marco del Hipódromo de San Isidro frente a este nuevo local en Bogota esquina Dardo Rocha no podíamos ser menos. Entonces pensamos que este espacio a concebir debía permitirnos meternos en ese paisaje, ser parte de él. Así, este exclusivo local cuenta con terrazas y galerías acondicionadas para disfrutar del aire libre, tanto de día como de noche, en cualquier estación del año.
En este 2002 tomamos el gran riesgo, cruzamos la “frontera”, y festejamos. Con la alegría de un excelente año, aun sin concluir, nos encontramos con un nuevo festejo. Habíamos decidido por entonces comprometernos mas con el deporte convirtiéndonos en el Sponsor oficial del Club Regatas de Bella Vista y brindamos junto a ellos el cierre de un año brillante.
El 2003 nos sorprendió inaugurando otro local, esta vez en Fitz Roy esquina Soler, en Palermo Hollywood. Como siempre ROMARIO logró distinguirse rápidamente en la zona no solo por la calidad de nuestras pizzas y empanadas, sino además por la atmósfera distendida que se respira en su interior, gracias a su esmerada decoración y buen gusto.
Ya para entonces nuestras ansias de expansión eran ilimitadas. Queríamos estar en todos los hogares, que todos supieran que la “buena pizza” existía, esa que nos motivó a soltar toda nuestra creatividad en el temprano año ´89. Entonces el Delivery vía Internet se hizo realidad. A través de nuestro sitio, www.romario.com.ar, nuestros clientes se dieron el gran gusto. Entraron a nuestra cocina llevándose a sus casas lo que más querían, nuestros productos con total comodidad.
Cualquier emprendimiento posterior parecía a esta altura poco desafío para nosotros. En la primavera del 2006 floreció en la esquina de Gurruchaga y Gorriti un nuevo ROMARIO, casi sin que nos diéramos cuenta. Tal vez, con tantos logros y aciertos en nuestras espaldas, suene banal decir que nos encontrábamos en la zona más top de la Ciudad de Bs.As., en el corazón de Palermo Soho, visitada por cuanto turista arriba al País. Pero que decir. Cada centímetro de ciudad que fuimos devorando resultó ser el alimento exacto para nuestra pasión desenfrenada. Ya nada podía detenernos. Para el 2006 la Ciudad de Buenos Aires era nuestra. Habíamos conquistado a “la gran Manzana” adueñándonos para siempre de los paladares de sus habitantes.
Nos tocaba un nuevo desafío, empujar las fronteras llegando mas allá. En la esquina de Av. Del Libertador y Granada, en Acassuso decidimos plantar nuestra segunda bandera. Y valió la pena. Tanto esfuerzo y sacrificio nos encontró inaugurando el local mas grande de toda nuestra cadena. Este nuevo espacio cuenta con dimensiones que superan los 400 m2 de superficie, pudiendo albergar a más de 280 comensales. Casi nada, ¿no?.
Llega el año 2008 y nos pareció correcto inaugurar una nueva sucursal en la calle Honduras 5670, entre Fitz Roy y Bonpland, Palermo Hollywod. Algunos se preguntaran porque, habiendo un Romario a tan pocas cuadras, abrimos otro. La respuesta es porque es un punto neuralgico ubicado estratégicamente en el ámbito capitalino siendo el lugar de mas alto índice de construcciones edilicias de los últimos cinco años, torres que superan los cincuenta pisos, los mas importantes estudios televisivos, rodeado de la mejor gastronomía concentrada en un solo punto, como así también excelentes bares como el UNICO, CARNAL y tantos otros.
Llega el mes de Septiembre y tras la apertura se produce la crisis más importante en los últimos 80 años. El mundo se desmorona, las Empresas quiebran, muchas otras reducen personal, creyendo que de esa forma reducirán costos y equilibraran sus cuentas, los activos de las Empresas llegan perder el 500% su valor, y dentro de ese contexto Romario creyendo y actuando de manera contraria decide no reducir personal dándole mayor capacitación, aumentando salarios, algo poco común en épocas de crisis.
En 2009 la crisis se profundiza y actuando en consecuencia en base a nuestros principios decidimos comenzar un nuevo proyecto, pudiendo en un futuro no muy lejano satisfacer a un público tan exigente y sabio en materia de buen comer como es el de la zona del bajo Belgrano y barrio River, donde en poco tiempo estaremos encantados de recibirlos a todos. La ubicación por el momento es una incógnita, pero les aseguramos que no solamente les va a quedar cómodo sino que también les va a encantar.
PD. La mejor manera de superar un crisis es crear nuevas fuentes de trabajo, es lo que venimos haciendo en los últimos veinte años.
Y asi nuestra “buena pizza”, esa que invade los sentidos despertando sensaciones placenteras en nuestro paladar, llega cada vez más lejos. Para ello seguimos trabajando como siempre lo hicimos a lo largo de todos estos años, con pasión, creatividad y el valor inobjetable de la mejor calidad como guia para nuestros objetivos.